Normalmente escogemos indistintamente la joyería o bisutería en oro o plata sin tener en cuenta cuál de estos metales nos favorece más.
Aunque las piezas que más favorecen son las que se colocan alrededor de nuestro rosto (pendientes y collares),
no debemos olvidarnos de las que se colocan en el resto del cuerpo, ya
que pueden no favorecer y crear un mal efecto con nuestra piel.
Lo que debe ser determinante en tu elección para escoger joyas doradas o plateadas es el tono de tu piel. Si tu piel es rosada, tiende a sonrojarse, es olivácea o en tono porcelana te irá mejor la plata.
Por el contrario, si tu piel es dorada y/o tiene pecas, entonces será cálida y le sentarán mejor los tonos dorados.